Los consumidores actuales son cada vez más conscientes del impacto que genera cada decisión de compra. Cuando hablamos de cierres de vino, las alternativas son múltiples: corcho natural de una pieza, micro aglomerados, sintéticos de plástico, tapa a rosca, etc. El caso de Nomacorc se presenta como innovador: es un tipo de cierre técnico, que quiere decir que previene el TCA o «gusto a corcho», que, además, se crea a partir de materia prima renovable; caña de azúcar.
Cuando el consumidor de vino elige su botella en el supermercado, difícilmente conozca estas opciones en detalle y qué implican para la preservación del vino y del medioambiente. Por eso, los tapones Nomacorc usan leyendas sustentables como «Porque cuidamos el medio ambiente usamos tapones Green Line» -en los vinos Sylvestra, de Bodega Bressia– o «Este corcho está hecho con materia de origen vegetal 100% renovable» -en los vinos de la Liga de Enólogos del Grupo Peñaflor-.
Nomacorc pertenece al portfolio de marcas de la compañía internacional de cierres de vino, Vinventions. De origen belga/norteamericano, Vinventions produce distintos sistemas de cierre para vinos tranquilos de todo el mundo y, aquí en Sudamérica, tienen base en Argentina.
¿Por qué es tan importante el cierre de vinos?
Quienes disfrutan del vino saben de la importancia que cumple el tapón: no tiene que afectar la bebida sensorialmente, debe ser fácil de extraer y reinsertar y, lógicamente tiene que conservar la ceremonia de apertura de la botella. Además de todo esto, los tapones de Nomacorc Green Line cumplen con una función que quizá se le escapa al consumidor común y que, sin embargo, es de vital importancia para resguardar la calidad del vino: que haya un ingreso controlado de oxígeno a la botella. El vino es un ser vivo y necesita de la micro-oxigenación para continuar su evolución dentro de la botella. Cada tapón del portfolio de Nomacorc garantiza un ingreso de oxígeno preciso, homogéneo y transparente, lo cual se puede observar en las tasas de transferencia indicadas en las fichas de los productos. Esta información es clave para el enólogo porque le permite saber cuál debería ser el tapón específico según el perfil del vino y el momento ideal de consumo.
En la búsqueda de una producción sustentable, todo el ciclo productivo de Nomacorc permite que el tapón llegue a la casa de los consumidores con una huella de carbono mínima o neutral. El tapón, si bien no es biodegradable, sí es completamente reciclable, a diferencia de los corchos microaglomerados que, debido a su componente de poliuretano, no lo son.
Elegido por las bodegas argentinas más prestigiosas
Son muchas las bodegas que han confiado en Nomacorc para tapar sus vinos: Zuccardi, Grupo Peñaflor, Salentein, Los Haroldos, Trivento, Bodega de Fin del Mundo, Finca La Anita, Finca la Celia, Norton, Yacochuya, entre cientos de clientes.
Algunos de estos tapones contribuyen al cuidado del medioambiente por provenir de materias primas de origen renovable.
Franco Falasco, de Bodega Los Haroldos, destaca la amplia variedad de tapones que posee el portfolio: «Desde hace más de 8 años que operamos con Nomacorc. Poseen un sistema de tapado muy confiable, libre de TCA y funcionan perfecto para las categorías de vinos tranquilos tanto de media como de alta gama. Para Los Haroldos Estate y Reserva utilizamos Select Green».
Los tapones de Nomacorc Green Line cierran vinos de todas las zonas vitivinícolas de Argentina, desde Salta hasta la Patagonia argentina, incluyendo Cuyo -Mendoza y San Juan-. Bodega Putruele, la emblemática bodega sanjuanina elige a Nomacorc hace varios años.
Expande rápidamente y produce un cierre inalterable en cuanto a olores y sabores desagradables que pueden generarse con otros tapones, manteniendo las cualidades del vino en óptimas condiciones. Si bien al comienzo teníamos algunas dudas por tratarse de un producto innovador para la industria, hoy podemos decir que los resultados fueron más que satisfactorios.
Desde el Sur de nuestro país, Bodega Del Fin Del Mundo tiene un compromiso férreo con el medio ambiente; trabajan para que todas sus prácticas desde el viñedo a la bodega sean más sustentables. «El eslabón final de la producción de vinos es el sistema de cierre y, por eso, elegimos Nomacorc: nos garantizan el cuidado nuestros vinos para que lleguen vivaces a cada copa y, al mismo tiempo, buscan generar un impacto positivo en el medio ambiente».
Un tapón para cada vino
Una de cada cuatro botellas comercializadas en la Argentina lleva un tapón de Nomacorc y la marca ofrece hoy cinco tipos de productos, atendiendo a la amplia gama de vinos que hay en el mercado. Cada uno de ellos es coherente con el ciclo de vida de los vinos de cada segmento: Reserva (para guardas de 25 años), Select Green (guardas de hasta 15 años), Classic Green (para vinos de media/alta gama), Smart Green (para vinos de entrada de gama) y Value (vinos de alta rotación). La empresa está haciendo pruebas industriales para el uso de material reciclado en varias de estas líneas con el objetivo de garantizar el ciclo de vida infinito de los tapones.
Dentro del portfolio de Vinventions también se encuentra Wine Quality Solutions, una división de negocios que ofrece dispositivos de tecnología altamente innovadora para controlar atributos como la transferencia de oxígeno, la concentración y característica de los polifenoles, la intensidad de color y el contenido de C02.